Un dato poco conocido, incluso en ambientes ferroviarios, es que en el Ferrocarril Estratégico a Baterías funcionó la primera locomotora eléctrica que operó en la Argentina, en el año 1906. En esta nota se tratará de contextualizar este hecho y aportar datos y documentación hasta ahora inéditos o poco frecuentados por los investigadores.

El Ferrocarril y el Puerto Militar.

Cuando se dispuso la construcción del Puerto Militar en el paraje denominado Punta Alta, éste era un  lugar alejado, sin vías de comunicación rápidas y seguras ni con la ciudad de Bahía Blanca ni con el resto del país. Si no era por mar, el trayecto que mediaba con la cercana ciudad se debía hacer a caballo o en carruajes, a campo traviesa, entre médanos y salitrales. En esas condiciones, se hacía  complicado acercar materiales de construcción y aprovisionamiento para las obras del puerto y los operarios. Por eso el ingeniero Luigi Luiggi, nombrado por el gobierno argentino Director General de las Obras, dispuso entre los trabajos complementarios y urgentes a desarrollarse, el tendido de una vía férrea que conectase Puerto Belgrano con el resto de la red ferroviaria nacional.  Los primeros trabajos en el futuro Puerto Militar comenzaron a mediados de 1897 y casi un año después, el 2 de junio de 1898 se firmó el Decreto autorizando la construcción de un ramal de Grünbein a Punta Alta:

“Vista la nota y planos presentados por la Comisión local del F.C. del Sud para la construcción de un ramal entre la Estación Grümbein (sic) y Punta Alta ó Arsenal de la Armada, y teniendo en cuenta la conveniencia que existe por razones de orden militar, en que dicho ramal se construya á la brevedad posible,

El Presidente de la República, en acuerdo de Ministros, decreta:

Llegada de Ferrocarril del Sud a Estación Punta Alta, 30 de agosto de 1898. De pie sobre la locomotora puede verse la silueta de Artur Coleman, superintendente de tráfico de la Compañía. (DEHN)

Art. 1° Autorízase al F.C. del Sud para construir un ramal férreo y telégrafo, que partiendo de la Estación “Grümbein” (sic) termine en “Punta Alta” aprobándose  al efecto los planos, bases, pliegos de condiciones y especificaciones presentadas por la Empresa constructora.

Art. 2° Encárgase á la Dirección de Ferrocarriles para que vigile é inspeccione las obras que por este decreto se autorizan, como asimismo facúltase á esta Repartición para que apruebe los planos, pliegos de condiciones y especificaciones de todas las modificaciones que durante la construcción se resuelva introducir en el proyecto definitivo, de acuerdo con la dirección de las Obras del Puerto Militar” [1].

Como se desprende del documento, el Estado no dejaba a las empresas privadas al libre arbitrio, sino que se reservaba el papel de fiscalizar la marcha de los trabajos. A pesar de su ideología liberal y de ser un Estado aún en formación, existían organismos de control que, más o menos eficientes, vigilaban el cumplimiento de los pliegos de condiciones y de todo lo pactado entre el gobierno y las empresas. Más aún, cualquier modificación de la obra debía comunicarse y consultarse al ingeniero Luiggi para ser debidamente aprobada por el gobierno a través del ministerio respectivo.

Estación Punta Alta del F.C.S., 1898. (DEHN)

El contrato se firmó con la empresa británica Ferrocarril del Sud, por ser la mayor del país y porque sus vías eran las que más cerca pasaban del Puerto Militar, eligiéndose la Estación Grünbein como lugar de empalme del desvío hacia los obrajes. El proyecto estuvo a cargo del ingeniero sueco Carl Malmén, (1842-1927), arribado al país en 1868 y que trabajaba para el Ferrocarril del Sud. Malmén también fue el responsable del tendido del ferrocarril desde Bahía Blanca a Zapala, que se construyó en forma paralela con el que nos ocupa. De ese modo, ante el peligro de una guerra abierta con Chile, quedaba asegurado el transporte de tropas hacia la Cordillera de los Andes y el enlace rápido entre el Puerto Militar y Zapala.

Las obras se ejecutaron velozmente y los 25 kilómetros de vías y el edificio de la Estación fueron concluidos en poco menos de dos meses. Finalmente, el 26 de septiembre de 1898 comenzó a funcionar el servicio de carga y el 1° de noviembre el de pasajeros. El tren llegaba a la estación llamada “Punta Alta”, donde hoy funciona el Museo Naval Puerto Belgrano. Sin embargo, unos meses después, el 19 de junio de 1899 el Gobierno emanó un decreto por el que se sustituía el nombre de la estación Punta Alta por el de Puerto Militar, conforme a lo considerado:

Punta Alta a principios del siglo XX. A la derecha, se ve parte de instalaciones ferroviarias correspondientes al Ferrocarril Sud (Estación Punta Alta).
En el fondo, las primeras casas sobre Progreso y Transvaal. (AHMPA)

“Habiendo manifestado la Dirección General del Puerto Militar, la conveniencia que habría de cambiar el nombre de las estaciones “Punta Alta” y “Puerto” del F.C. del Sud, así como las Oficinas Nacionales situadas en ambos puntos, por otros que eviten las confusiones á que estos dan lugar, y no existiendo inconveniente alguno que impida aceptar, las que en sustitución propone la mencionada Dirección,

El Presidente de la República decreta:

Art. 1° Sustitúyese los nombres de las estaciones del F:C. Sud “Punta Alta y Puerto” por las de “Puerto Militar é Ingeniero White” respectivamente, previas formalidades del caso que llenará la dirección General de Vías de Comunicación”[2].

Se ignora cuáles fueron las confusiones que menciona el decreto para realizar los cambios de nombres. Pero lo cierto es que, a diferencia de Ingeniero White que fue adoptado para dar nombre al pueblo de obreros portuarios que se constituyó en torno a esa estación, en Punta Alta la gente siguió llamando a la incipiente población conforme al nombre original de la Estación, que era de antigua data.

Croquis de las líneas ferroviarias en 1898.

A partir de ese entonces, se mejoraron sustancialmente las condiciones de comunicación y de aprovisionamiento del área. A tal punto que el grueso de los obreros abandonó el campamento de Arroyo Pareja y se trasladó en proximidades de la flamante estación, que, como aconteció en tantos lugares de la provincia de Buenos Aires, dio su nombre al pueblo[3]. Era este ramal el que tanto civiles como militares tomaban libremente para viajar a Bahía Blanca o Buenos Aires y quedaría explotado por el Ferrocarril del Sud.

Sin embargo, estaba previsto el tendido de unas vías internas, con finalidades exclusivamente militares. El trazado ferroviario, contemplado por Luiggi, era una circunvalación que alcanzaba los muelles y la zona de Polvorines, en el extremo noroeste de la zona militar[4]. Estas labores, llevadas a cabo por el ingeniero Juan Amézola del Ministerio de Obras Públicas, fueron entregadas al Ministerio de Marina el 29 de octubre de 1906 y puestas en servicio inmediatamente[5].

Ferrocarril Estratégico.

La instalación de las baterías de defensa del Puerto Militar en Punta sin Nombre ( o Congreso), representaban un problema. El 18 de abril de 1899 se dispuso el traslado de los cañones Krupp a las Baterías desde su emplazamiento original en Zárate[6], pero el desplazamiento no era para nada fácil, dado lo precario de las comunicaciones. Hasta finales de 1898, los bloques de piedra para el revestimiento de las casamatas se transportaban por ferrocarril desde Sierra de la Ventana mientras que las piezas de artillería eran embarcadas también por tren en Buenos Aires. Ambos materiales llegaban a la estación Grünbein, donde eran recogidas por carretas. Estos pesados vehículos eran tirados por cinco yuntas de bueyes, y los 40 km que mediaban entre la estación de ferrocarril y el paraje Baterías era cruzado en varios días, ya que en oportunidades lograban avanzar hasta dos kilómetros diarios.

Pero el contrato firmado entre el Poder Ejecutivo y el Ferrocarril del Sud comprendía también la construcción de  un ramal estratégico desde Punta Alta hasta Punta Sin Nombre, que se tendería en forma simultánea con el ramal Grünbein –Punta Alta. El artículo 9 del contrato entre el Gobierno y el Ferrocarril del Sud explicitaba:

Puente sobre el Arroyo Pareja del Ferrocarril Estratégico, 15 de septiembre de 1898. (DEHN)

“El Ferro-carril del Sud construirá, además, por cuenta del Poder ejecutivo, un ramal estratégico desde la Estación “Arsenal” (Punta Alta) hasta el paraje conocido por “Punta Sin nombre”, y tres ramales secundarios, de acuerdo con el plano, presupuesto y especificación que apruebe el director de las obras del Puerto Militar”[7].

También el artículo siguiente exigía un desvío hacia las canteras de Sierra de la Ventana, para empalmar a la altura de Tornquist con la red principal del Ferrocarril del Sud y así poder trasladar las piedras más rápidamente:

“Art. 10. También construirá un desvío, por cuenta del Poder Ejecutivo, desde la estación Tornquist hasta la cantera, con una extensión de más o menos cuatro kilómetros”[8].

El proyecto de construcción del ramal Punta Alta –Baterías fue realizado por dos ingenieros que colaboraban con Luiggi en las obras del  Puerto  Militar, Oreste Vulpiani y Antonio Burgoni  en 1898.  La extensión total era  de unos 23 km, además de contar con varios empalmes. Recorre terreno accidentado y cruzó Arroyo Pareja a través de un puente de 220 m. de longitud construido al efecto. Las vías corren siempre detrás de los médanos de la costa, para quedar oculta desde el mar y dificultar de este modo su destrucción eventual por un ataque enemigo. Al igual que el Ferrocarril del Sud, posee trocha ancha, con rieles de acero de 27 kg por metro lineal, durmientes de quebracho y balastro de conchilla y tierra arcillosa.  Su construcción comenzó en Arroyo Pareja, en forma simultánea  en dirección a Punta Alta y a las Baterías, mientras se tendía el puente. El 20 de septiembre de 1898 circuló el primer tren de prueba e inmediatamente lo hicieron los convoyes que llevaban los cañones a su emplazamiento definitivo. El Ferrocarril Estratégico, como los ramales internos del Puerto Militar, fueron construidos por del Ministerio de Obras Públicas (MOP), que también lo tenía a su cargo. En 1906 todos  ellos pasaron  a jurisdicción del Ministerio de Marina en conjunto con los otros ramales internos de Puerto Militar en 1906.

La primera locomotora eléctrica del país.

Un dato poco conocido es que el Ferrocarril Estratégico contó además con la primera locomotora eléctrica que operó en la Argentina, alimentada por batería y que empezó a funcionar el 2 de julio de 1906[9]. Esta locomotora, adquirida en Inglaterra, era similar a la adoptada por Alemania para el mismo fin[10].  Llevaba el número de fábrica 225,  tenía un poder de arrastre de 30 toneladas y alcanzaba una velocidad de 25 k/h. La energía eléctrica necesaria era aportada por una fuente de acumuladores recargables. Por eso había un sitio de recarga en el km. 14, donde habían sido instalados dos grupos generadores Siemens, acoplados a sendos motores de 50 HP cada uno, alimentados con gas pobre[11]. Después del toque de silencio, disminuía el alumbrado eléctrico y entonces se utilizaba el excedente de energía para cargar los acumuladores de la locomotora. Esta carga era útil para un recorrido diario de unos 60 Km, lo que equivale a dos viajes de ida y vuelta entre Puerto Militar y Baterías)[12]

Esta locomotora fue puesta en servicio en el marco de la visita efectuada a Ingeniero White, Puerto Militar y Arroyo Pareja por el ingeniero Miguel Tedín y el contraalmirante Onofre Betbeder, ministros de Obras Públicas y Marina respectivamente.

“Se trata de un viaje de inspección y de estudio, que ha de constituir, sin duda, la ejecución de obras de importancia, reclamadas en Puerto Militar. No es extraña à esta excursión ministerial la idea siempre latente en las esferas oficiales de ensanchar el Puerto Militar para hacerlo servir á funciones comerciales ó determinar el paraje más apropiado para la construcción de un gran puerto comercial de aguas profundas”[13].

Primera locomotora eléctrica del país, que funcionó en Baterías (Archivo Héctor Guerreiro)

El articulista aludía a la instalación de un muelle comercial dentro del Puerto Militar que supliera a la zona destinada a ese tipo de operaciones que se determinó en 1903. El Estado finalmente optaría por concesionar en 1906, la construcción del  muelle en el antepuerto. La concesión fue otorgada a Diego de Alvear, quien la negoció con la Compañía del FC Rosario Puerto Belgrano, de capitales franceses. En 1908 comenzó a construir el llamado Muelle C, que entró a servicio en 1911. Luego de una disputa legal, finalmente fue expropiado por el Estado en 1914.

Después de inspeccionar el dique de carena Nº 1, las instalaciones del Puerto Militar y Arroyo Pareja (donde el ingeniero Pagnard propuso construir un gran puerto de aguas profundas), la comitiva decidió no viajar a Baterías, dada la lluvia que caía, “á pesar de los deseo del ministro Tedín, y de la novedad que ofrecía el estreno de la locomotora eléctrica que hizo ayer su primer viage (sic) entre Baterías y Puerto Militar”[14].

La locomotora en cuestión entró en funcionamiento gracias a la reciente inauguración de la usina y las instalaciones eléctricas en Baterías. Estas venían construyéndose desde tiempo atrás y servirían  para sacar “ la fuerza que en breve y por medio de acumuladores moverá los trenes desde Estación Puerto Militar á Baterías”[15]. Una nota del Boletín del Centro Naval motivada en la inauguración de estas infraestructura motriz, expresaba:

“Como estas instalaciones, aparte del servicio ordinario a la población, etc, han sido hechas para llenar necesidades en caso de guerra, ha sido indispensable colocar motores cuya fuerza toda no es posible aprovechar totalmente en épocas normales, pero para subsanar ese inconveniente se dispone de una locomotora eléctrica destinada al ferrocarril estratégico que recorre la zona. Por medio de una batería de acumulación de esta locomotora, se consigue mantener constantemente la carga completa sobre la dínamo, de manera que el motor a gas puede trabajar constantemente con su máximo de rendimiento. Esta locomotora conduce las tropas de guarnición de las baterías y provisión diaria de víveres al Puerto Militar, y entra de noche a la usina para cargar su batería con el exceso de fuerza de los motores. En tiempo de guerra esta máquina de tracción ofrece ventajas indiscutibles con relación a la de vapor, por cuanto no proyecta luz ni humo de ninguna clase que la pudieran hacer visible”.[16]

Conclusión.

El proyecto del Puerto Militar no hubiera podido concretarse sin la existencia de ferrocarriles modernos y operativos que trasladasen materiales de obras y sirvieran de vía de comunicación para la creciente población de civiles y militares. Asimismo, las funciones militares dentro del apostadero naval y entre éstas y Baterías requerían de un conjunto de instalaciones ferroviarias para trasladar de manera eficiente pertrechos y hombres a distintos puntos alejados entre sí.

El ferrocarril, en esa época, era mayoritariamente cosa de ingleses y en el caso del Puerto Militar, a ellos recurrieron, en la figura del Ferrocarril del Sud, el mayor de Argentina en ese entonces. Sin embargo, según se ha visto, el Estado no le dio carta blanca para hacer su voluntad, sino que colocó el conjunto de los trabajos bajo el control del Ministerio de Obras Públicas y de acuerdo a un contrato detallado.

En este marco, la incorporación por parte del Estado de la primera locomotora que funcionó en el país no movida por la fuerza del vapor marca un hito en la historia ferroviaria. Lamentablemente por ocurrir fuera de Buenos Aires y en un ámbito militar y reservado, este hecho no es sabido por la mayor parte de los historiadores ferroviarios. Es entonces un deber del Archivo Histórico Municipal de Punta alta poner en relieve hechos como éste; que no solamente hacen al debido conocimiento de un pasado local con proyección nacional sino que en un análisis más profundo, muestran la labor insoslayable del Estado en la consecución de grandes obras de infraestructura.

Por Lic. Gustavo Chalier.

Fuentes

  • Armada Argentina: Reseña histórica de la Base de Infantería de Marina Baterías, s.l, s.f, p. 9
  • Chalier, Gustavo: “Ferrocarril Sud. Eje generador de la ciudad de Punta Alta”, en El Archivo, Publicación del Archivo Histórico Municipal de Punta Alta, Año III, Número 7, Punta Alta, julio de 2003, pp. 2-7
  • “Contrato entre el Gobierno nacional y el Ferrocarril del Sud para tendido de un ramal entre Grünbein y el Arsensal de Puerto Militar”, Archivo General de la Armada, caja 67.
  • Crespi Valls, Antonio; Boffi, Estanislao y Carrà, Juan: Gran Álbum de Punta Alta-1898-1941, p.43
  • Guerreiro, Héctor: Los ferrocarriles en Bahía Blanca (1884-1948), t. 2, Bahía Blanca, Ed. Del Autor, 2011.
  • “Instalaciones eléctricas en Puerto Militar”, en Boletín del Centro Naval, Tomo 24, N° 272, julio de 1906, p. 346
  • La Nueva Provincia, abril de 1905 y junio y  julio de 1906.
  • Schlatter, Eduardo (recopilador): Leyes, contratos y resoluciones referentes á los Ferrocarriles y Tranvías á tracción mecánica de la República Argentina, Tomo 4, Buenos Aires, Taller Tipográfico de la Penitenciaría Nacional, 1904, p. 429.
  • Schlatter, Eduardo (recopilador): Leyes, contratos y resoluciones referentes á los Ferrocarriles y Tranvías á tracción mecánica de la República Argentina, p. 430.

Citas

[1]Schlatter, Eduardo (recopilador): Leyes, contratos y resoluciones referentes á los Ferrocarriles y Tranvías á tracción mecánica de la República Argentina, Tomo 4, Buenos Aires, Taller Tipográfico de la Penitenciaría Nacional, 1904, p. 429.

[2] Schlatter, Eduardo (recopilador): Leyes, contratos y resoluciones referentes á los Ferrocarriles y Tranvías á tracción mecánica de la República Argentina, p. 430.

[3] Cf. Chalier, Gustavo: “Ferrocarril Sud. Eje generador de la ciudad de Punta Alta”, en El Archivo, Publicación del Archivo Histórico Municipal de Punta Alta, Año III, Número 7, Punta Alta, julio de 2003, pp. 2-7

[4] “Resolución aprobando los planos de obras complementarias del F.C. de Circunvalación de Puerto Militar”, 22 de julio de 1905, en Schlatter, Eduardo : Leyes, contratos y resoluciones referentes á los ferrocarriles y tranvías á tracción mecánica de la República Argentina,, tomo 6 ,Ministerio de Obras Públicas, Buenos Aires, Establecimiento  Gráfico La Unión, 1911, p.717.

[5] “Decreto disponiendo la entrega al Ministerio de Marina, de una variante del Ferrocarril Estratégico en el Puerto Militar”, en Schlatter, Eduardo: Leyes, contratos y resoluciones referentes á los ferrocarriles y tranvías á tracción mecánica de la República Argentina, p. 818.

[6]Crespi Valls, Antonio; Boffi, Estanislao y Carrà, Juan: Gran Álbum de Punta Alta-1898-1941, p.43

[7]“Contrato entre el Gobierno nacional y el Ferrocarril del Sud para tendido de un ramal entre Grünbein y el Arsensal de Puerto Militar”, Archivo General de la Armada, caja 67.

[8] Íbidem.

[9] La Nueva Provincia, 3 de julio de 1906, p.1.

[10] La Nueva Provincia, 29 de abril de 1905, p. 2

[11] Cf. Guerreiro, Héctor: Los ferrocarriles en Bahía Blanca (1884-1948), t. 2, Bahía Blanca, Ed. Del Autor, 2011.

[12] Cf. Armada Argentina: Reseña histórica de la Base de Infantería de Marina Baterías, s.l, s.f, p. 9

[13] La Nueva Provincia, 30 de junio de de 1906, p.1

[14] La Nueva Provincia  , 2 de julio de 1906, p.1

[15] La Nueva Provincia, 18 de septiembre de 1904, p. 1

[16] “Instalaciones eléctricas en Puerto Militar”, en Boletín del Centro Naval, Tomo 24, N° 272, julio de 1906, p. 346

La primera locomotora eléctrica de Argentina funcionó en Baterías.

8 pensamientos en “La primera locomotora eléctrica de Argentina funcionó en Baterías.

  • abril 13, 2021 a las 11:46 am
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    Como siempre, una excelente nota. Nos deja pensando cuando comparamos el ayer y el hoy.

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  • abril 13, 2021 a las 1:16 pm
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    Es genial que haya gente que ilumine estos detalles tan significativos que nos hacen ver un país con pensamiento estratégico, cosa que ya no ocurre y dónde vivimos de tácticas temporarias en una singladura sin rumbo cierto. Gracias por semejante trabajo y traer luz a nuestros conocimientos y más aún tan caros para puntaltenses nacidos en la BNPB, como es mi caso. Gracias de corazón.

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    • mayo 9, 2021 a las 6:41 am
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      Me encantó poder acceder a esta información. Desconocía la locomotora electrica que funcionó entre Puerto Militar y Baterías. Me agradaria saber si esa locomotora aún se conserva y donde se encuentra, o fue desmantelada.

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      • mayo 10, 2021 a las 12:26 pm
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        Buenos días:
        Gracias por contactarse. Hasta el momento, la información con la que contamos es la que se publicó. El paradero de la locomotora todavía, es desconocido. Seguiremos investigando para poder dar con esa información.

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  • abril 13, 2021 a las 2:02 pm
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    Buenos días, el presidente que autoriza la construcción de los ramales, era el mismísimo Julio Argentino Roca en 1898, verdad?

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    • abril 13, 2021 a las 2:50 pm
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      Hola Juan Carlos: El Presidente que autoriza la construcción de los ramales fue José Evaristo Uriburu. Muchas gracias por contactarse.

      Responder
  • abril 15, 2021 a las 11:35 am
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    Excelente información, siempre es bueno conocer algo nuevo sobre Punta Alta y Puerto Belgrano.

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