La Asociación cumplió el día 29 de julio sesenta años de existencia, y es acaso la única sobreviviente, de un proceso de esplendor que en los años 60-70 llegó a contar con tres instituciones colombófilas y varios decenas de palomares en condiciones de competir tanto a nivel nacional como internacional.

La primera sede con la que contó la institución estuvo ubicada en un salón en cercanías del viejo edificio del Colegio Nacional. Fue en el año 1966, y mediante un subsidio provincial, que se adquirió un terreno en la calle Rivadavia 1200, donde se construyó la actual sede.

La actividad colombófila reúne entre sus filas a importantes personalidades locales, y son algunos de ellos Jorge Arévalo y el ex concejal Faustino Montero, quienes además firmaron el acta fundacional de la institución.

Las actividades que llevan a cabo los colombófilos se dividen en dos etapas, la primera consiste en una parte organizativa de las actividades a llevar a cabo , y la otra consiste en el encanastamiento de una paloma. Esta última etapa hace referencia a la clasificación de los ejemplares por el sexo, se sellan sus patas, se le pone un número de código y se deposita a las palomas en sus respectivas canastas, dejándolas preparadas para la competencia.

“Este es el D N I de las palomas”, indicó el presidente de la institución y señaló un anillo plástico en una de las patas de los animales que contiene el número de código y el año de registro. “Nos damos cuenta si es macho o hembra por la cara”, explicando que los machos tiene la cabeza más grande, un comportamiento más agresivo y arrullan con mayor frecuencia.” Una paloma para poder competir debe encontrarse en óptimas condiciones de salud.

Luego del encanastamiento y de su traslado hacia el lugar de la competencia, sólo se espera que los animales vuelvan y comienza el registro de la hora de llegada y el control correspondiente para determinar posiciones. Esta fase se realiza con relojes especiales, mecánicos o digitales, y hasta con otros sistemas sofisticados de rastreo, donde se le incorporan chips a las aves, permitiendo ello su localización mediante sistema satelital.

Toda esta actividad llevada a cabo por la asociación está supervisada por el Comando en Jefe del Ejército Argentino y regulada por la Secretaría de Comunicaciones del ministerio de Defensa, pues se considera que pueden ser utilizadas en casos necesarios (estado de conmoción pública, desastre meteorológico o fenómeno natural), aún contando hoy día con un alto nivel de tecnología. En este sentido, si se diera la mencionada situación, los ejemplares podrían ser confiscados en su totalidad.

Entre algunas de las satisfacciones con que cuenta la “mensajera puntaltense” es haber representado al país (con un ejemplar del señor González) en una competencia internacional, logrando dos primeros puestos, en Colombia, en el año 1995.

La actual Comisión Directiva de la institución está conformada de la siguiente forma:

Presidente: Luis González

Vicepresidente: José Sanfilippo

Tesorero: Roberto Ayuso

Comisario Deportivo: Manuel Moure

Asistente: José Dalesandro.

Unos treinta socios aportan su cuota, que sirve para el mantenimiento de la sede, pago los servicios y la organización de los torneos, además de la compra de los trofeos. La situación económica que atraviesa el país, encuentra a la institución en condición patrimonial sólida, pero con dificultades, aunque siempre sobran las buenas voluntades.

En el marco de los proyecto, la entidad pretende organizar un torneo para niños con características especiales, donde cada participante recibirá tres pichones anillados por parte de la institución para hacerlos participar en competencias cortas. La idea es despertar en las generaciones más jóvenes el amor por los animales en general y particularmente hacia las palomas y paralelamente asegurar la continuidad institucional.

Fuente: La Nueva Provincia ; domingo 1 de agosto de 2004.